viernes, 31 de agosto de 2007

Entrada al reportaje de las "niñas araña"

"El nido de las arañas"



Son conocidas como "las arañitas" pero actúan como verdaderas arañas de rincón, no solo por el peligro que representan para la sociedad, sino también porque realmente provienen de uno de los rincones más recónditos, ignorados y desprotegidos de la capital. Aferradas como por verdaderas telas a la Toma de Peñalolén estas niñas que trepan con gran rapidez y audacia por los edificios no encontraron otra vía de escape a la pobreza que ir a tejer sus redes delictivas al barrio alto de Santiago. Fueron sus rasgos finos de araña tigre los que les permitieron adentrarse fácilmente en el sector. A pesar de ser detenidas en reiteradas ocasiones, los tribunales las dejaban rápidamente en libertad considerándolas una especie de araña pollito sin poder de disernimiento, por su corta edad. Sin embrago la historia de estas niñas de escasos recursos, adheridas a la plaga de la delincuencia, tuvo su final cuando fueron detenidas por el "tanax" de la ley.

Abuela Transantiago

Vagón de la línea cuatro fue el escenario elegido para saltar a la fama

Abuelita se manda festín
de frases contra el Transantiago

Señora de la tercera edad “la rompe” en Internet con sus divertidos y revolucionarios llamados para protestar contra el actual sistema de transportes de la capital.




“En el gobierno militar protestamos a cacerolazos, ¿por qué no lo vamos a hacer ahora?”, “levantémosle las manos al gobierno”, “esto parece una feria de animales”, fueron algunas de las freses que se escucharon en la semana en uno de los vagones rebalsados de gente de la línea cuatro. En medio de risas y apretada como el puño de un boxeador en la pelea final reclamaba una usuaria de la tercera edad respecto del actual sistema de transportes que caóticamente se apoderó de la Región Metropolitana desde el 10 de febrero.

Ejemplificando con las protestas realizadas en la época del gobierno militar, esta señora que apenas se ve en el vagón, pero que se escucha por todas partes, llama a “alzar la voz a punta de cacerolazos ante los pelagatos de los ministros”. Con una constante tos que interrumpe sus demandas relata el trayecto que día a día debe realizar para ir desde su casa hasta algún punto de la capital “tengo que tomar un taxi para llegar al metro y esto parece una feria de animales” dice mientras intenta por todos los medios sacar un pañuelo de su bolsillo.

Es tanto el ímpetu por demostrar su descontento al gobierno, que si tuviera la edad de una chiquilla probablemente sería una de las primeras en andar revolviéndola en la Alameda, “los hombres son unos cobardes, no seamos tontos y levantémosle las manos al gobierno, salgamos a protestar mañana a las nueve y media de la noche, metamos bulla” dice obteniendo sonrisas y llamando la atención hasta que alguien le cede el asiento y se queda callada.

Fue Felipe Plaza (25), un joven publicista que viajaba en el vagón entre las estaciones de Macul y Cristóbal Colón, quien se percató del peculiar llamado a protestar contra el Transantiago que hacía la “abuelita del metro” y decidió grabar con su celular las frases que llenaban de sonrisas los deslucidos rostros de los usuarios. Bastaron sólo dos minutos y dos segundos para que esta desconocida anciana de Peñalolén saltara a la fama en “Las Ultimas Noticias” y se convirtiera en la sensación del momento en portales como elantro.com o youtube.com, con más de ocho mil visitas.